LA LEYENDA DEL WESAK



"Aquí les voy a contar un relato…..

   … La gran fuerza de Amor está siendo liberada en la Tierra, por el trabajo mediador de Kristo, actuando como representante de Dios, ayudado y asistido en esta obra por el esfuerzo consciente y la Energía Divina del Buda.

. La Nueva Era de Paz, se introduce por la unión en toda la Tierra de las fuerzas que impulsan la reconstrucción y el verdadero desenvolvimiento evolutivo. En todos los países se está produciendo una unión consciente y deliberada de grupos que personifican el principio de la fraternidad, en la medida que pueden percibirlo. Los hombres vigilan los signos de los tiempos y no han de desalentarse cuando miran el futuro inmediato.

Es la inmediata e inmanente probabilidad de la reconstrucción mundial y de la reaparición del Kristo, transmigrado en todos los Seres preparados para encarnar su energía, que se visualiza mentalmente cada año en el Festival de Wesak, durante el Plenilunio de Mayo. Los aspirantes ayudan a llevar adelante los objetivos de esas Grandes Inteligencias que tratan de ayudar a la humanidad en esta época, mediante una definida concentración en el momento del Festival y familiarizan paulatinamente al pensador occidental de la realidad de esta oportunidad. Pueden así crear una corriente de aspiración y un vórtice de fuerza que constituirá, un llamado vivo que traerá una respuesta definitiva (en el sentido espiritual de la palabra) por parte de aquellos que tratan de ayudar….

La reaparición del Kristo y su manifestación se inicia en cierto Festival de Wesak, en el que La Gran Invocación es pronunciada por Buda, y libera la fuerza Divina, que prepara el camino para Su Gran Hermano, asistiéndole en la realización de Su Misión. Es por esta razón, que se está produciendo un creciente reconocimiento del Festival Wesak en Occidente. Ha llegado el momento, en que el Occidente debe comprender el verdadero significado de este acontecimiento. A medida que los hombres y mujeres de buena voluntad comprendan y aprovechen esta oportunidad que brinda el Festival Wesak, y que se alinean con una determinada energía Espiritual, serán vitalizados y estimulados espiritualmente por esta energía y consiguientemente, estarán dispuestos para servir.
Todas las fiestas cristianas, se conmemoran en honor de acontecimientos pasados y sucesos que ocurrieron siglos atrás o se realizan en honor de algún gran Discípulo de Kristo que sirvió a la raza en el pasado, como Él lo hizo. El Festival Wesak se celebra en reconocimiento de un acontecimiento actual y viviente. 

Este hecho actúa en el mundo espiritual y tiene su contraparte física. Paralelamente a la ceremonia subjetiva y espiritual, tiene lugar simultáneamente un acontecimiento de cierta importancia en un pequeño valle de Tíbet, del otro lado de los Himalayas. Es allí que tiene lugar la ceremonia terrestre de la Bendición y así mucha gente del distrito y de los alrededores encuentran el camino hacia el valle, como peregrinos hacia la Luz. Luego, a la hora del Plenilunio, se realiza un solemne ritual, que puede ser visto y reconocido con toda claridad como cualquier ceremonial en nuestras grandes catedrales.

La ceremonia puede se describe así:

"Existe un valle situado a una altura bastante elevada al pie de los Himalayas Tibetanos. Este valle está rodeado por altas montañas a ambos lados con excepción del noreste, en donde hay una estrecha abertura. …

En la fecha del Plenilunio de Mayo empiezan a afluir peregrinos de todos los distritos próximos; los santos hombres y mujeres, los lamas llegan al Valle y ocupan la parte sur y media dejando el extremo noreste relativamente libre. Allí (según la leyenda) se congrega un grupo de aquellos Grandes Seres que son los custodios sobre la Tierra del Plan de Dios para nuestro Planeta y para la Humanidad…  los Maestros de Sabiduría, la Jerarquía Planetaria, que en sus diversos grados están regidos y guiados por Kristo, el Maestro de Maestros, de Ángeles y de Seres Humanos por igual; o pueden también llamarlos los Rishis de las Escrituras Hindúes, o la Sociedad de Mentes Iluminadas, según la enseñanza tibetana. Ellos son los Grandes Intuitivos y los Grandes Compañeros según la presentación moderna y son el conjunto de la humanidad perfeccionada, que han seguido los pasos de Kristo y han penetrado, por nosotros, en los misterios, dándonos ejemplo para que hagamos lo que ellos han hecho. Con su Sabiduría, Amor y Conocimiento constituyen una muralla protectora para la humanidad y tratan de guiarnos paso a paso, (como ellos fueron guiados en su momento) de la oscuridad a la Luz, de lo irreal a lo Real, de la muerte a la Inmortalidad. Este grupo de Conocedores son los principales participantes del Festival de Wesak. Se sitúan en el confín noreste del Valle y en círculos concéntricos, …   Frente a la roca, mirando al noreste, están Aquellos Seres que son llamados por sus discípulos "Los Tres Grandes Señores" que son: el Kristo, que se sitúa en el centro; el Señor de las Formas Vivientes, el Manú, que se sitúa a Su Derecha; y el Señor de la Civilización, que se sitúa a Su izquierda. Los Tres se colocan frente a la roca, en la que descansa una gran copa de cristal llena de agua."

Hay un hecho interesante que arroja cierta luz sobre esta ceremonia y su realidad, es que los que han soñado que participaban en ella, están seguros de la exacta posición que ocuparon en la parte más baja del Valle. Una persona que me la describió, me dijo que estuvo a un lado, junto a un árbol en el que estaba atado un caballo; otros parecían conocer muy bien el lugar en que se encontraban. Pocos se daban cuenta que el lugar que ocupaban en el grupo de observadores, indicaba con toda claridad el estado de evolución del participante.

“Detrás del Grupo de Maestros, Adeptos, Iniciados y Colaboradores Mayores en el Plan de Dios, se encuentran los discípulos y aspirantes del mundo, en sus varios grados y grupos, “en el cuerpo o fuera de él” (citando a S. Pablo), quienes constituyen en esta época el Nuevo Grupo de Servidores del Mundo. Los que estaban presentes físicamente, llegaron allí por medios comunes. Otros estaban presentes en sus cuerpos espirituales y otros en sueños. El "sueño" que ellos relatan, ¿no podría ser el reconocimiento físico y el recuerdo de un suceso espiritual interno?.

Al acercarse el momento de la Luna Llena, se produce una gran quietud en la muchedumbre, y todos miran al noreste. Entonces, tienen lugar ciertos movimientos rituales, en los que los Grupos de Maestros y Sus Discípulos de todos los grados, ocupan su lugar en posiciones simbólicas, como la estrella de cinco puntas, con Cristo en la cima; o un triángulo con Cristo en el vértice superior, o una cruz y otras formaciones conocidas, que tienen un profundo y potente significado. Todo esto se hace mientras se entonan ciertas palabras y frases esotéricas, llamadas mántrams".

La expectativa de los asistentes aumenta y la tensión se hace mayor, acrecentándose cada vez más. A través de todo el grupo de personas, parece sentirse un estímulo o vibración potente que tiene el efecto de despertar las almas de los presentes, fusionando el grupo en un todo unificado, elevándolos a un gran acto de invocación, ansiedad y expectativa espiritual. Es el punto culminante de la aspiración mundial enfocada en este grupo expectante. Estas tres palabras: inspiración, ansia y expectativa, son las que mejor describen el ambiente que rodea a los que asisten a esta Ceremonia en el Valle Secreto.

“El cántico y el movimiento rítmico se intensifican cada vez más y todos los participantes y la multitud elevan sus ojos hacia el cielo, en dirección de la angostura del Valle.

Unos pocos minutos antes de la hora exacta de la Luna Llena puede verse, a lo lejos, un pequeño punto en el cielo, acercándose cada vez más y poco a poco su silueta se hace más nítida, se definen sus contornos hasta que la forma de BUDA se hace visible. Sentado en posición de loto, envuelto en su manto azafrán, bañado en Luz y Color, y con una mano extendida bendiciendo. Cuando Buda llega al punto exacto central sobre la gran roca, flotando sobre las cabezas de los Tres Grandes Señores, un gran mántram, que se pronuncia una vez al año en el Festival, es entonado por Cristo y todos los asistentes, que se encuentran en el Valle se postran. Esta Invocación produce una gran vibración o corriente de pensamiento, ¡de tal potencia!, que llega, desde el grupo de aspirantes, discípulos e iniciados hasta Dios mismo. Señala el momento supremo del intenso esfuerzo espiritual de todo el año y la vitalización espiritual de la humanidad y sus efectos espirituales duran a través de los meses subsiguientes. El efecto de esta Gran Invocación es universal o cósmico, y sirve para unirnos con ese Centro Cósmico de Fuerza Espiritual, del cual han venido todos los seres de la Creaci6n. Se imparte la Bendición y Cristo, como representante de la humanidad la recibe para distribuirla".

Así, según la leyenda, Buda vuelve una vez al año, para bendecir al mundo, trasmitiendo a través de Cristo, nueva vida espiritual.

"Luego... lentamente, Buda se aleja, hasta que nuevamente puede verse sólo un punto en el cielo que finalmente desaparece. Todo el ceremonial de la bendición, desde su primera aparición en la lejanía, hasta el momento en que Buda desaparece, tarda sólo ocho minutos. El sacrificio anual de Buda por la humanidad (pues viene a costa de un gran sacrificio) ha terminado y Él retorna nuevamente a ese Alto Lugar donde trabaja y espera. Año tras año vuelve para bendecir, año tras año la misma ceremonia se realiza, año tras año Buda y Su Gran Hermano, Cristo, trabajan en la más íntima cooperación para el beneficio espiritual de la humanidad. En estos dos Grande Hijos de Dios, se han concentrado dos aspectos de la Vida Divina. Ellos actúan juntos como custodios del más elevado tipo de fuerza espiritual, a la que la humanidad puede responder. Mediante Buda fluye la Sabiduría de Dios; mediante Cristo el Amor de Dios se manifiesta a la humanidad; esta Sabiduría y este Amor se derraman sobre la humanidad cada Luna Llena de Mayo".

"Cuando Buda ha desaparecido, la multitud se pone de pie, el agua de la copa es distribuida en pequeñas porciones a los Maestros, Iniciados y discípulos, y luego ellos retornan al lugar del servicio. La multitud bebe el agua, en copas o jarros que han traído y la comparten con los demás. En esta magnífica “Ceremonia del Agua” se nos presenta en forma simbólica la Nueva Era de Acuario, que está ya en el umbral. La era de “Acuario”: la del "Aguador", como dijo Cristo en ese episodio que precedió al servicio de comunión iniciado por Él. Esta Ceremonia perpetúa para nosotros el hecho de la universalidad del Amor de Dios, la necesidad de nuestra purificación individual y la oportunidad de compartir con cada uno lo que pertenece a todos. El agua, magnetizada por la presencia de Buda y de Cristo, contiene ciertas propiedades y virtudes que ayudan y curan. Bendita así, la multitud se dispersa silenciosamente, los Maestros y discípulos regresan con renovada fuerza para cumplir otro año de servicio en el mundo".

Esta leyenda o esta revelación de un acontecimiento espiritual auténtico y vital, lentamente llega en estos días a Occidente y suscita de parte de muchos curiosidad, admiración, preguntas... Algunos aspirantes Occidentales piensan que ha llegado el momento, tanto para Occidente como para Oriente de unirse espiritualmente en una gran Fiesta y Comunión de almas, en unión con todos, bajo la dirección de Buda, que encarnó para traer la Luz a Oriente, y con Cristo que vino para traer la Luz a Occidente. Podemos pedir y evocar en común una bendición y una revelación espirituales, que nos permitirá gozar de "paz en la Tierra y buena voluntad entre los hombres”, que tanto necesitamos actualmente. Podremos así acceder a la era de fraternidad y de comprensión que permitirá a cada uno, liberarse del miedo y tener más tiempo para buscar a Dios.

La Ceremonia de Wesak es desde el punto de vista espiritual, el acontecimiento más importante en nuestro planeta, siendo el testimonio más eficaz del acontecimiento que causa el mayor efecto sobre la humanidad. Su influencia siempre se “siente”, aunque la mayoría de las personas lo ignoren. Es importante que ahora sea admitido, aceptado y conscientemente utilizado por todos. Cada uno de los grupos de servidores que colaboran con pleno conocimiento de causa en todo el planeta con la Jerarquía Planetaria, que actúan así, según ciertas leyes, mediante palabras de poder y ciertas Grandes Invocaciones, obtendrán de esta manera los resultados requeridos. La unificación del ritmo de algunos de estos grupos y de sus invocaciones, permite la relación de núcleos de aspirantes con la conciencia de ciertas Grandes Vidas e Inteligencias. Esto se produce cuando aprenden a alinear sus personalidades con sus almas. Estos grupos de aspirantes pueden entrar en contacto con el mundo subjetivo de estas Inteligencias por intermedio de dos puntos focales: Buda, representante del campo de las realidades espirituales subjetivas que nos rodean, y Cristo, representante del mundo de las aspiraciones humanas. Este hecho está simbolizado, para nosotros por el rito de la Iglesia, en el que el sacerdote es un punto focal. Hay que remarcar una diferencia importante. El sacerdocio, en el transcurso de las grandes "ceremonias de contacto" en el futuro, no será exclusivo de unos pocos. Todos, incluso los profanos podrán oficiar los ritos, siempre y cuando sean capaces de alinearse con el alma y de entrar en contacto con ella con el objetivo de colaborar con las otras almas."

Felíz Luna Llena de Wesak!

No hay comentarios: